miércoles, 17 de agosto de 2011
Madrid, capital de España, país que según su Constitución es laico y respeta todas las confesiones religiosas. La vía pública madrileña, la calle que es de tod@s creyentes, ateos o agnósticos invadida por el sector fundamentalista, mojigato, obtuso, falto de la cordura elemental de la iglesia católica...