lunes, 23 de marzo de 2009

Origen poético (de cuando yo era otro)

Si nunca hubiese debutado en la realidad amorosa

adorando el tacón roto de la casi infantil Andrea

posiblemente ahora no estaría aquí, escribiendo poesía.

Si nunca hubiese descubierto al buen amigo que me ha hecho

a ratos la vida imposible. Si nunca hubiese escrito

estaría un poco más loco, tendría una vanidad esquelética

o sería feliz sin letras, sin juego de versos, no lo sé.

Si escribo es por todas esas historias de la infancia miedosa

por todas esas montañas de culpa adolescente,

por toda esa posesión de amor truncado.

Si nunca hubiesen existido mis padres tal cual son ahora

tal cual fueron como yo los recuerdo con la memoria relativa

de las cosas que hoy ya me parecen demasiado viejas.

Si no hubiese existido 1993, 1991, 1992, 1995, 1981, 1974,

si no hubiese encontrado a Rubens, a Javier,

a tanta gente que vino prometiendo futuro y estuvo simplemente de paso.

Si escribo, no lo dudes, es porque tuve y tengo de vez en cuando

mi corazón palpitando en la cuneta, porque tengo muchas ganas de vivir

aunque mi tristeza como un gran telón infame

cubra con natural indecencia el valor de mi cara,

el valor de mi incondicional amor a la vida,

el valor de la hospitalaria frase que te digo para que no te vayas,

el valor de todo lo que soy y he sido bajo la sombra

y el potente sol de primavera.

Si escribo es por una historia de desamor muy larga,

porque vale la pena contarte en qué momento nací para los versos

y dejé de ser aquel chico gamberro que te amó

sin haber leído ni un solo verso de Pablo Neruda.

1 comentario:

Ascanio dijo...

Victor, sin duda este es uno de tus poemas más hermosos.